Otra vez las pastilleras copan la noche montevideana

Dos hombres salieron de "levante" y terminaron dormidos y robados
La noche del sábado se prestaba para salir a disfrutar. Las diferentes opciones que ofrece la ciudad llevaron a que dos divertidos veteranos tomaran como opción el boliche "Tropicolonia". Lo que nunca imaginaron es que allí comenzaba su somnífera odisea.
LECL, de 40 años, y su amigo APB, de 47, tomaron unas cervezas y se prepararon para salir a "romper la noche". A las 12.30 ambos estaban en la puerta del "Tropicolonia" esperando para entrar. Dos muchachas, que hacían la cola intercambiaron miradas pícaras con los bailarines que pensaron que habían comenzado bien la velada.
Dentro del local se cruzaron en reiteradas oportunidades con las chicas, pero ninguno se animaba a entablar una conversación.
Cuando la música dejó de sonar y las luces se encendieron, los hombres se acercaron a las bellas damas y las invitaron a "pasar un buen rato" en el domicilio de uno de ellos. Las mujeres no dudaron en aceptar y se encaminaron al exterior del boliche.
Fuera, las dos flamantes parejas abordaron un taxi y se dirigieron al cruce de Carlos Bacigalupi y Madrid, domicilio del hombre de 47 años.
Cerveza va, cerveza viene, los hombres entraron en un profundo sueño, mientras las pastilleras, que con sutileza habían colocado somníferos en los vasos de los hombres, revisaron la casa de arriba a abajo y se apoderaron de cinco mil pesos en efectivo.
Cuando los hombres recuperaron la consciencia no podían creer lo que había pasado, se encaminaron a una seccional policial y radicaron la denuncia, aportando que una de la chicas trabaja como prostituta en un local céntrico.
Varios móviles policiales recorrieron la zona indicada por los damnificados pero nada se supo de las pastilleras, que con la misma clase con que los durmieron, lograron escapar. *