23.11.2004 | 7.15
Una asonada originada por un policía que prestaba el servicio 222 en una plazoleta del Complejo Euskal Erría 70, derivó en actos de vandalismo y tiroteos que dejaron como saldo una persona muerta. Otros seis jóvenes fueron heridos. Dos de ellos están internados en estado grave en el Hospital Pasteur. "Hubo una reacción totalmente fuera de lugar del policía que cumplía el servicio 222", dijo a En Perspectiva el jefe de Policía, Nelson Rogriguez Rienzo.
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En medio de la batahola, un grupo de marginales del asentamiento ubicado en los alrededores de la Facultad de Ciencias invadió el complejo de viviendas. Entre otras cosas, saquearon comercios de la zona, robaron a varios vecinos e incendiaron las garitas de la Policía.
El Comando de la Jefatura dispuso el despliegue de las fuerzas de choque para contener la violencia. Pero según los vecinos, la reacción policial fue tardía y hubo unas dos horas en las que el lugar fue "tierra de nadie".
Por su parte, el jefe de Policía de Montevideo, Nelson Rodríguez Rienzo, reconoció que la conducta del policía, totalmente desmedida, fue la que desencadenó los hechos. "Hubo una reacción totalmente fuera de lugar del policía que cumplía el servicio 222. (...) Trajo su arma de reglamento y comenzó a disparar sobre los jóvenes", sostuvo. Contó que ese efectivo ahora está detenido, incomunicado, a la espera de que el juez le tome declaraciones.
Rodríguez Rienzo recordó que hubo reacción por parte de vecinos y las unidades policiales, así como las ambulancias y equipos de bomberos fueron recibidos a pedradas.
Contó que se armó un pequeño incendio en uno de los pasajes y a todo el que pretendía pasar, se lo robaba y golpeaba. Por eso, explicó, hubo que pedir refuerzos.
No obstante, ante los reclamos por la demora policial, dijo que están haciendo una investigación interna para ver qué pasó.
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